La construcción de las murallas medievales empezó a partir de un decreto de las autoridades venecianas que data de 1278, pero no tenemos la certeza de que antes no hubieran existido en alguna forma. Sin embargo, las obras avanzaban lentamente, lo que se refleja en un decreto veneciano de 1326/1327 en el que se ofrece dinero a los habitantes de Hvar para la construcción de las murallas. Las murallas fueron terminadas en su forma actual a mediados del siglo XV cuando Hvar nuevamente cayó bajo el dominio veneciano. Ya en el siglo XVI las murallas fueron abandonadas y cayeron en desuso dado que la ciudad se expandió fuera de ellas y perdieron su función defensiva original. Las murallas de la ciudad tienen cuatro puertas. La principal es la puerta suroeste, Porta Maestra. La sureste es la Puerta de Santa María o la Puerta de la Diócesis. La puerta occidental es la de Gojava y la oriental se llama Porta Badoer o Gradno Vrota.